
¿Quién tirará la primera piedra?
Irán ordenó lapidar a una mujer que recibió 99 latigazos por la sospecha de adulterio Por Sakineh Mohammadi Ashtiani claman casi 140.000 personas de varios países. Son las signatarias de una petición de clemencia a las retrógradas autoridades religiosas de la República Islámica de Irán. Es espantoso que una mujer de 43 años como ella, madre de dos hijos, reciba 99 latigazos en mayo de 2006 como condena por mantener una “relación ilícita”, sinónimo de extramatrimonial, con el presunto asesino de su marido y que, más de cuatro años después, deambule por el corredor de la muerte de la prisión de Tabriz, en el noroeste del país, con una cruz aún más pesada sobre sus hombros: estar sentenciada a ser enterrada hasta el pecho y apedreada hasta la muerte. ¿Está muerto el marido cuando mantiene relaciones con su amante? De estarlo, las ampollas en su espalda tardan más en cicatrizar que el dolor de ser acusada ahora por otro tribunal que decide reabrir su causa por sospechar que esos encuentros son en vida del difunto (leer más)