Política

La versión edulcorada de los talibanes

Contada en primera persona por Malala Yousafzai, la chica que sobrevivió al intento de asesinato de los talibanes en Pakistán y resultó ser la ganadora más joven de la historia del Premio Nobel de la Paz, la versión edulcorada de los nuevos patrones de Afganistán se diluye de inmediato. Malala recuerda su infancia: “Cuando los talibanes tomaron mi ciudad natal en el valle de Swat en 2007 y poco después prohibieron que las niñas recibieran educación, escondí mis libros bajo mi largo y grueso chaúl y caminé a la escuela con miedo. Cinco años después, cuando tenía 15 años, los talibanes intentaron matarme por alzar la voz sobre mi derecho a ir a la escuela”. Un derecho vedado a las mujeres por la sharía (ley islámica), así como trabajar fuera de casa y salir a la calle sin el burka y en compañía de un hombre de la familia. Malala, de 24 años, víctima del régimen talibán, recibió tres balazos en 2012. Iba en un autobús escolar. Rumbo al hospital militar en Peshawar, su padre, (leer más)

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Matan a pobres corazones

El horror sacudió esta vez a Pakistán, donde los talibanes ingresaron en una escuela a la que concurren hijos de militares y mataron a más de un centenar de personas, en su mayoría estudiantes En la película Charlie Wilson’s War (La guerra de Charlie Wilson), distribuida con el título Juego de poder, el representante demócrata Charlie Wilson (Tom Hanks), alentado por una millonaria texana ultraconservadora y católica, Joanne Herring (Julia Roberts), y secundado por un agente secreto desencantado con la CIA, Gust Avrakotos (Philip Seymour Hoffman), acuerda repeler a las tropas soviéticas de Afganistán, regado de campos de refugiados, con el dictador paquistaní Mohamed Zia ul-Haq (Om Puri). Se trata de una historia real, basada en la biografía de Wilson escrita por George Crile. La condición del convenio era que las armas cedidas por Israel no tuvieran estrellas de David. Wilson empeñó su palabra. Era un rústico representante (diputado), de botas puntiagudas, de un distrito perdido de Texas. Se ufanaba de su anticomunismo y de su debilidad por el alcohol, las drogas, las juergas y (leer más)