Temporada de palomas
Si Ehud Barak y Yasser Arafat hubieran estado frente a frente a mediados de los 80, uno de los dos habría disparado primero. Uno de los dos, en teoría, no sería hoy el primer ministro de Israel o el líder de la Autoridad Nacional Palestina. Habría muerto uno de los dos, seguramente. Sería un mártir más de los tantos que atesora Medio Oriente, en definitiva. Pero Barak, el militar más condecorado de la historia de Israel, y Arafat, el fusil cantante de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), no se encontraron en esos tiempos y hoy, por fortuna, lanzan señales de humo que, en la realidad entre velos que circunda la frontera de la Franja de Gaza, dan pautas de acercamiento. Son los halcones de ayer, cara y cruz con Bill Clinton, Tony Blair y Gerhard Schroeder, pacifistas de los 60 que, a pura bomba sobre Yugoslavia por la emergencia humanitaria de Kosovo, tuvieron que quitarse el plumaje de palomas. ¿Qué hace uno si advierte que el vecino está pegándole a la mujer? (leer más)