Cultura

El padre de El Gran Hermano

I Tronó temprano el teléfono, despabilándolo, en la estación de policía de Moulmein, allá lejos, en la baja Birmania, antigua colonia británica. Transcurría la década del veinte. Él era un oficial de subdivisión recién llegado de Londres. Tanteó el auricular. “¡Un elefante está devastando la feria!”, reconoció en el grito la voz de un subinspector birmano. Los elefantes eran empleados en las plantaciones de teca para desplazar troncos. Siempre existía el riesgo de que alguno se descarriara y provocara destrozos. Algo usual para un nativo, no para un novato como él. Tomó su Winchester 44, rifle demasiado pequeño para vérselas con un animal tan grande, y montó en su caballo. La mañana era húmeda y sofocante, como cualquier mañana de la estación de lluvias. En el camino, interrumpido infinidad de veces por birmanos alterados, iba enterándose de las fechorías del elefante. Que había hecho añicos una choza de bambú, había matado a una vaca, había invadido un puesto de frutas, había dado vuelta un carro municipal… Su cornac (domador) era el único capaz de detenerlo, pero (leer más)

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La minoría más perseguida del mundo

La Cámara Federal de Apelaciones de Argentina aceptó en 2021 un caso de jurisdicción universal contra las autoridades de Myanmar por el genocidio rohingya, siguiendo una denuncia presentada en noviembre de 2019 por la organización Burmese Rohingya Organization UK (BROUK, sus siglas en inglés). La presentación estuvo a cargo del abogado argentino Tomás Ojea Quintana, relator especial de la ONU sobre la situación de los derechos humanos en Myanmar de 2008 a 2014 y en Corea del Norte de 2016 y 2022. Dice en Ojea Quintana en Cuarto de Hora, programa de CADAL TV, que que hay un compromiso importante de la Justicia Federal de Argentina en el caso de los rohingya. Todo comenzó en 2017. El ejército de Myanmar lanzó una campaña genocida que obligó a más de 800.000 rohingya a huir de sus casas, en su mayoría hacia la frontera con Bangladesh. Las llamadas “operaciones de limpieza” se llevaron a cabo a través de asesinatos generalizados y sistemáticos; violación y violencia sexual, y otros abusos. Las personas rohingya que continúan viviendo en el (leer más)

Sociedad

Muchos refugiados, grandes beneficios

Por Jorge Elías Los miran mal y los tratan peor. Quizá porque no saben que los refugiados no representan el costo ni el peligro que muchos declaman, sino el beneficio que pocos conocen. Lo dicen a coro el Banco Mundial (BM) y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) frente a una realidad lacerante: 65 millones de personas, la pavorosa cantidad de personas que debió abandonar sus hogares a la fuerza, equivalen a la población del Reino Unido, de Francia o de Tailandia. Dos tercios de ellos, 41 millones, son desplazados que buscan protección en sus países. El resto, 24 millones, se aventura al exterior. Es la mayor crisis humanitaria desde la Segunda Guerra Mundial. Los refugiados escapan de la violencia de Siria, Afganistán, Somalia, Sudán del Sur, Sudán, la República Democrática del Congo, la República Centroafricana, Birmania, Eritrea y la ahora pacificada Colombia. Nueve de cada diez prueban fortuna en países en desarrollo. En el Líbano y Jordania, limítrofes con Siria, representan el 18 y el nueve por ciento de (leer más)

Cultura

Ser supersticioso trae mala suerte

No pocos presidentes tocan madera, evitan que se cruce delante de ellos un gato negro o, en los peores casos, echan mano de la magia negra Mientras era presidente de Rumania, Traian Băsescu vestía cada jueves de púrpura para ahuyentar a los malos espíritus. Los sindicatos de brujas, astrólogos, embalsamadores y afines convocaban ese día a sus afiliados para echarle maldiciones al gobierno con excremento de gatos y de perros muertos por haber creado un impuesto que gravaba sus actividades y los obligaba a hacer aportes a los sistemas de jubilación y de salud. No existía pócima ni hechizo capaz de hacer recapacitar a los políticos, sus peores enemigos terrenales. La crisis no perdonaba ni respetaba  conjuros. En Colombia, mi casi tocayo Jorge Elías González, chamán y radioestesista, embolsó una millonada por impedir que lloviera en la ceremonia de clausura del Mundial de Fútbol Sub-20, en 2011. Usó, según su medulosa explicación, «un péndulo universal programado con siete péndulos sometidos a una misma fuerza y localizados estratégicamente con respecto a la posición del sol y (leer más)