Cuba, borrón y cuenta nueva con la deuda Argentina
¿Cuentas claras conservan la amistad? No siempre. A veces, la escasa voluntad de pago del deudor y la vista gorda del acreedor contribuyen a mantener una relación cordial que, en principio, debería tener más valor que precio. Es lo que prima entre las personas, no entre los países. La Argentina ha hecho una excepción con Cuba: fracasó en sus intentos de cobrarle un préstamo millonario que le otorgó hace cuatro décadas por medio de un convenio de cooperación económica. El gobierno peronista de entonces rompió de ese modo el bloqueo impuesto en 1962 por los Estados Unidos al régimen de Fidel Castro. La concesión de aquel crédito fue anunciada durante una visita a La Habana del ministro de Economía argentino, José Ber Gelbard, en agosto de 1973. Gelbard, nacido en Polonia, criado en la Argentina, fallecido en los Estados Unidos, era el afiliado número 525 del Partido Comunista Argentino. Lo adoraban tanto en el régimen de Fidel Castro como en la Unión Soviética y en el Partido Demócrata norteamericano. El dinero, unos 200 millones de (leer más)