Política

Cerrado por Brexit

El primer ministro británico, Boris Johnson, se salió con la suya. Obtuvo la venia de la reina Isabel II para clausurar las sesiones del año parlamentario en la segunda semana de septiembre y estrenar el siguiente apenas dos semanas antes del Brexit. El 31 de octubre, la fecha clave, coincide con Halloween. En la Noche de Brujas, según la creencia celta, los espíritus salen de los cementerios para resucitar en los cuerpos en vida. No habrá esta vez truco o trato (traducción mañosa de trick or treat), sino truco. El truco consiste en recortar el tiempo del debate en Westminster para evitar una salida caótica de la Unión Europea. La prórroga, término oficial de la suspensión de las sesiones parlamentarias, debe ser aconsejada por el primer ministro y aprobada por la reina. La reapertura, en la Cámara de los Comunes, está signada por el Discurso de la Reina, íntegramente redactado por el gobierno de turno cual plan de acción. Johnson aprovechó esa veta legal, como su antecesora, Theresa May, en 2017, para crear aquello que (leer más)