
Las «expulsiones» de diplomáticos y cónsules
Por Ricardo Arredondo (*) | El Derecho 1 Introducción En cuestión de unas pocas horas, el lunes 26 de marzo de 2018 Rusia perdió más de ciento cincuenta de sus diplomáticos en los Estados Unidos, Europa y otros países como resultado de las expulsiones coordinadas en respuesta a la intoxicación de un exespía, Sergei Skripal, y su hija, Julia, en el Reino Unido. La administración Trump expulsará a cuarenta y ocho funcionarios diplomáticos rusos de los Estados Unidos, 12 de la Misión Permanente de Rusia ante las Naciones Unidas y procederá también a cerrar el consulado ruso en Seattle. Medidas similares han sido anunciadas por otros 26 países y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Tres días después, Rusia anunció que tomará medidas recíprocas. Expulsará a 150 diplomáticos (60 estadounidenses, 23 británicos y de otros 25 países, principalmente europeos), y dispuso el cierre de la oficina del British Council en Moscú y del consulado de Estados Unidos en San Petersburgo (como dato anecdótico, en su cuenta de Twitter, la embajada rusa en Washington (leer más)