Economía

El capital humano

Un ejecutivo de Los Ángeles le encargó a un joyero de Nueva York una pulsera para su esposa. Debía recibirla al día siguiente. Era su aniversario de bodas. Al día siguiente arribó a su oficina el repartidor de una compañía privada de transporte de paquetes. No figuraba en sus registros el envío de Nueva York. El ejecutivo no podía entenderlo. “Dejar pasar el aniversario de bodas puede ser un error más grave que no entregar lo necesario para la cadena de suministros de un cliente”, pensó. El repartidor notó su fastidio. Había terminado su turno. Una hora después seguía hablando por teléfono. El paquete con la pulsera para la esposa del ejecutivo había quedado varado por un problema burocrático en la bodega de la compañía en Los Ángeles. Tras rastrearlo, el repartidor programó una visita especial para entregárselo esa misma tarde. Le dio al ejecutivo su número de teléfono móvil y el de su supervisor. El ejecutivo suspiró, aliviado. A las cinco de la tarde recibió, finalmente, el paquete con su preciado contenido. Al ver (leer más)

Cultura

Huelga de princesas

En el mundo nacen entre 104 y 106 niños por cada 100 niñas, lo que amplía la brecha entre los sexos y nutre un fenómeno llamado con justa razón “masculinización alarmante” No es el fin del mundo previsto por Nostradamus, los mayas y el mago Merlín, sino algo tal vez más aterrador: en momentos en que la humanidad cruza la barrera de los 7.000 millones de habitantes, hay 57 millones más varones que mujeres. En otros términos, sobran varones o, peor aún, faltan mujeres. La catástrofe, llamada con impiadosa justicia “masculinización alarmante”, revela ribetes apocalípticos: nacen entre 104 y 106 niños por cada 100 niñas. ¿Qué sentido tendrá postergar la jubilación y vivir más de 100 años en un planeta que, por exceso de varones, será como esas discotecas en las cuales no hay con quién bailar? El sueño de crear territorios de solteros, abrigado por unos pocos, terminará siendo la pesadilla de muchos, de pronto sorprendidos por las consecuencias de atrocidades, como los abortos selectivos, que inclinan la balanza hacia la procreación de varones (leer más)