Sociedad

El apagón anímico

El segundo año de la pandemia fue más difícil que el primero, según el índice anual de Gallup sobre las vivencias positivas y negativas de las personas. En 2021, dice, el mundo se convirtió en un lugar un poco más triste y la gente se mostró más preocupada y estresada que en 2020. Al año siguiente, más allá la liberación de algunas restricciones como los confinamientos, la situación empeoró. El síndrome de burnout (literalmente quemado) no perdona. El 42 por ciento de las personas con empleos de escritorio se sienten agotadas, dice un sondeo de Future Forum realizado en Estados Unidos, el Reino Unido, Japón, Australia, Alemania y Francia. ¿Estamos todos quemados? En Argentina, sin ir más lejos, prospera la insatisfacción. La preocupación, la incertidumbre, el miedo y la desconfianza encabezan la tabla de las perspectivas sobre el futuro en el informe mensual de Taquion. El título no deja lugar a dudas en vísperas de las elecciones primarias y generales: El año de la desconfianza. Va en línea con otras encuestas que también reflejan la (leer más)

Actualidad

Estados golpeados

En octubre de 2021 hubo un golpe de Estado en un Estado golpeado: Sudán. Cayó el primer ministro, Abdalla Hamdok. Quedó bajo arresto domiciliario. Lo repusieron al mes siguiente frente a un dilema: la suspensión de millones de dólares de ayuda internacional. Hamdok renunció el segundo día de 2022. No pudo formar gobierno. Habían pasado 42 días después del acuerdo que alcanzó con la junta militar mientras disfrutaba de una apacible jubilación. Las calles estallaron con una consigna que no respeta fronteras: que se vayan todos. Civiles, militares y afines. La hoja de ruta de la transición consistía en democratizar un país sometido durante tres décadas a la dictadura de Omar al Bashir, depuesto durante el año de las protestas a cuatro bandas, 2019. La de Sudán resultó ser la sexta asonada militar de 2021 después del ciclo iniciado el 1 de febrero en Myanmar, antes Birmania, en el sudeste asiático. Le siguieron otras en Mali, Guinea-Conakry y Chad mientras en Níger hubo un intento fallido al igual que en Sudán un mes antes de (leer más)

Sociedad

La pandemia del malhumor

Los frascos de las vacunas tienen tres palabras dramáticas: fecha de vencimiento. Y seis números aún más dramáticos: 08.2021. En la ciudad holandesa de Leiden, alerta The Washington Post, “90 pequeñas cajas blancas que contienen miles de dólares de la vacuna AstraZeneca” están a punto de caducar. ¿Por qué no son enviadas a otros países? Porque, por razones legales y logísticas, los Países Bajos no pueden donarlas. En Israel, agrega el Post, 80.000 dosis de Pfizer-BioNTech vencieron en julio. Polonia eliminó 73.000 de varios fabricantes. Mientras Argentina y otros países esperan la segunda dosis de Sputnik, Eslovaquia devolvió 160.000 a Rusia. El sobrante de unos contrasta con la emergencia de los otros. Sólo Carolina del Norte, Estados Unidos, dispone de 800.000 dosis con fecha de vencimiento inminente mientras apenas el 2,2 por ciento de la población de África había recibido la primera dosis a finales de julio. En África expiraron el 9 de agosto 469.868 dosis de varias marcas, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Liberia perdió 27.000. Malawi, 20.000. No se trata (leer más)

Catalejo

El café en primera persona

Quedamos pronto y fácil para compartir un café en casa o en un bar. Taza va, taza viene, el café suele ser una excusa, no un fin en sí mismo. Hasta que uno repara en la historia de ese grano tostado y molido que en el libro Yo, Cafeto, de Analía Álvarez, cuenta en primera persona su propia historia. Una historia que comenzó “desde aquel rayo de sol que calentó la tierra” en la antigua Abisinia, ahora Etiopía, país sin litoral del Cuerno de África, y que entregó generosamente sus semillas a profetas, sultanes, reyes, conquistadores y adelantados para que hicieran de todas las tierras del mundo su tierra. “Mi tierra”, como dice él mismo. O, en realidad, Álvarez, periodista, docente universitaria y especialista Q Grader en café arábica. La semilla debió esquivar varias peripecias, como la Petición Contra el Café, escrita por las damas de Londres en 1674 por la preferencia de los caballeros a dejarse subyugar por el placer del café en desmedro de otros placeres, o las denuncias de sus detractores de (leer más)

Cultura

Diferentes, no indiferentes

El mundo es cada vez más pequeño. Tan pequeño que, a veces, pensamos que cabe en la palma de la mano. En este mundo pequeño, la globalización ha derrapado en la antiglobalización y, a su vez, brotan como hongos los nacionalismos, causantes de las peores tragedias del siglo XX. Dos países pueden tener rasgos comunes, como Colombia, donde nació Clara Riveros, y Marruecos, donde invirtió varios años de investigación en busca de denominadores comunes con su terruño y con América latina. Los encontró en un contexto de cambio o, acaso, de transición. El final de la historia, mentado en los noventa, terminó siendo el detonante de otra historia. La actual. En este texto y en este contexto, Clara Riveros observa las dos orillas con ojo crítico. El ojo experto de la politóloga y analista que no se queda con la primera impresión. Que va más allá mientras ausculta una realidad diferente, la de Marruecos, a la cual no es indiferente. Eso de la cooperación Sur-Sur entre dos países que antes eran expulsores de personas por (leer más)

Política

Caos en Nigeria

El lema era End SARS. O acabar con el SARS, siglas del Escuadrón Especial Antirrobo de la Policía de Nigeria. Una suerte de banda parapolicial acusada de arrestos arbitrarios, torturas, asesinatos extrajudiciales y extorsiones. En las protestas, encabezadas por la generación iPhone (jóvenes de clase media nacidos en la también joven democracia), murieron 70 personas en un contexto acuciante. El de un país, el más poblado de África, con 202 millones de habitantes, 82 millones de pobres y 14 millones de niños sin escolarizar, que vive a la sombra de otra banda, la terrorista Boko Haram, filial del Daesh o ISIS. La caída del precio del petróleo, acentuada por la pandemia, llevó al gobierno a dejar de subsidiar el combustible, que aumentó un 15 por ciento. Las tarifas de electricidad se triplicaron y, cual broche, el SARS descargó su ira contra la sociedad civil. La réplica: movilizaciones masivas, saqueos, destrozos y ataques. Entre otros, contra medios de comunicación afines al presidente de Nigeria, Muhammadu Buhari, como el periódico The Nation y el canal de noticias (leer más)

Política

El califato sin califa

Poco antes de su muerte, Abu Bakr al Baghdadi, alias el califa Ibrahim, había reformulado la distribución geográfica del Daesh, ISIS o Estado Islámico en una veintena de países. El divorcio de las huestes del otro difunto más buscado por Estados Unidos, Osama bin Laden, selló las diferencias. El autoproclamado califato supuso algo ajeno al ideario de Al-Qaeda. Un estadio superior: establecerse en regiones bajo el imperio de la sharia (ley islámica), de modo de aprovechar el malhumor social frente al maltrato de las autoridades chiitas, aupadas por Irán y tropas extranjeras, contra la otra rama del islam, la sunita. De pronto, un grupo de hombres vestidos de negro arribó a Mosul, la segunda de Irak. Despuntaba junio de 2014. Portaban armas, pero, a diferencia de los soldados iraquíes, mandones y corruptos, se mostraban respetuosos. Con su presencia, en especial frente a los edificios públicos, cesaron los saqueos. Un día decidieron retirar los bloques de hormigón que afeaban las fachadas. ¿Era el final del caos derivado de la guerra iniciada con la invasión de Estados (leer más)

Sociedad

Amazonía: ¿catástrofe brasileña o mundial?

Cuando Jair Bolsonaro se trenzó con Emmanuel Macron por la ayuda económica del G7 para aplacar los incendios y la deforestación de la Amazonía invocó la soberanía. La soberanía sobre una fuente imprescindible de oxígeno, colosal sumidero de dióxido de carbono, que impacta en las corrientes oceánicas y en el clima mundial. La selva amazónica, compartida por Brasil y otros ocho países, perdió más de un 20 por ciento de su terreno en las últimas seis décadas. Sólo en agosto hubo unos 31.000 focos de incendio, casi el triple que en el mismo mes de 2018. Arrasaron una superficie equivalente a 4,2 millones canchas de fútbol. Bolsonaro apeló al orgullo nacional frente a la alarma mundial. Culpó de los incendios a las organizaciones no gubernamentales, amonestó a su par de Francia por haber tratado a Brasil como “una colonia o una tierra de nadie” y, tras meses de humo, prohibió temporalmente las quemas a agricultores, ganaderos, madereros, mineros y petroleros. Nada nuevo, pues cada año arrasan miles de hectáreas. Las de 2019 superaron las previsiones (leer más)

Videos

Récord mundial de migrantes

El barco Open Arms ha llevado a España a 308 migrantes, de los cuales 137 eran menores, que fueron rescatados en Libia. Algunos de ellos escaparon de las guerras de Somalia y de Siria. Se trata de un drama que ha recrudecido en los últimos años. Las migraciones han aumentado un 49 por ciento desde comienzos de siglo, según la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Un récord. Gran cantidad de personas han muerto ahogadas, han desaparecido en el desierto o han sido víctimas de traficantes de personas en su afán de escapar de guerras, conflictos o penurias económicas. La agencia de noticias Associated Press ha documentado la muerte o la desaparición de 56.800 en todo el mundo desde el 2014, el doble de la única cuenta oficial que existe. La de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). Después de un año y medio de negociaciones, casi 160 de los 193 miembros de la ONU decidieron contrarrestar la oleada nacionalista que sacude a Europa, Estados Unidos y otros confines en contra de los migrantes. (leer más)

Actualidad

La mitad de los pobres del mundo son menores

NUEVA YORK – La mitad de las personas pobres del planeta son menores de 18 años, según las últimas estimaciones del Índice de Pobreza Multidimensional Global de 2018 (IPM) publicado  por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Iniciativa sobre Pobreza y Desarrollo Humano de Oxford (OPHI, por sus siglas en inglés). Estos datos muestran que en 104 países, predominantemente de ingresos medios y bajos, 662 millones de niños y niñas son considerados multidimensionalmente pobres. En 35 de estos países, la mitad de todos sus niños son pobres. El Índice de Pobreza Multidimensional de 2018 mira más allá del ingreso monetario y muestra cómo la pobreza es la experiencia de enfrentar carencias múltiples y simultáneas. El IPM analiza cómo las personas están quedando rezagadas en el ámbito de la salud, la educación y el nivel de vida, con carencias tales como la falta de acceso a agua potable, a saneamiento, a una nutrición adecuada o a la educación primaria. Aquellos que se ven privados de al menos un tercio de (leer más)

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Bolsonaro apuñalado, Brasil herido

El ataque con una faca contra el candidato presidencial de extrema derecha Jair Bolsonaro implica un giro dramático en las elecciones más impredecibles de Brasil desde el retorno a la democracia, hace tres décadas. Las investigaciones de corrupción han puesto tras las rejas a decenas de hombres de negocios y políticos y han alienado a los votantes enfurecidos detrás de Bolsonaro El exparacaidista Bolsonaro sacudió por primera vez a la clase política cuando, como diputado apenas elegido en 1993, hizo un llamado al regreso del gobierno de facto: “Estoy a favor de la dictadura”. Eso no es todo en Brasil. El Tribunal Superior Electoral vetó la participación del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva en las elecciones del 7 de octubre debido a una condena por corrupción. El fallo despejó parte de la incertidumbre sobre las presidenciales. Los abogados de Lula apelarán ante el Supremo Tribunal Federal. La tensión subió en los últimos días con el incendio que destruyó el Museo Nacional, edificio histórico que carecía de un sistema de rociadores hídricos y sufría años (leer más)

Otras voces

El primer grupo terrorista amigable con el medioambiente

Por Rukmini Callimachi | The New York Times A lo largo de los años, Al Shabab, un grupo terrorista del este de África que ha jurado lealtad a Al Qaeda, ha prohibido la música, los cines, la televisión satelital y las organizaciones humanitarias. Esta semana, añadieron un nuevo artículo a su lista de prohibiciones: las bolsas de plástico. Los habitantes de las zonas controladas por el grupo terrorista, que opera fuera de Somalia, ya no podrán usar bolsas de plástico, por respeto al medioambiente. El anuncio —hecho por un grupo conocido más bien por ataques suicidas que han asesinado y mutilado a miles— dio pie a una oleada de memes de burla en internet: algunos de ellos se referían a Al Shabab como la primera organización terrorista amigable con el medioambiente. La declaración que prohíbe el uso de bolsas de plástico se publicó en Somalimemo.net, un sitio a favor de Al Shabab que, según se cree, dirige la oficina de medios del grupo terrorista. El sitio web transmitió una grabación en audio de Mohammed Abu Abdullah, el (leer más)

Política

La Constitución propone y Evo dispone

En el Palacio Quemado, de La Paz, el dictador más añejo de África, Teodoro Obiang, recibió el Cóndor de los Andes, la máxima distinción de Bolivia. El anfitrión, Evo Morales, confesó en su discurso que iba a preguntarle cómo había hecho para ganar las elecciones de Guinea Ecuatorial durante 38 años consecutivos. Fácil: autorizó la participación de partidos alternativos al suyo, el Partido Democrático de Guinea Ecuatorial (PDGE). En 2016, la oposición decidió retirarse tras denunciar irregularidades y un inminente fraude. Obiang obtuvo un 90 por ciento de adhesión. Aquello que parecía un cumplido para el “hermano Teodoro” resultó ser algo así como el presagio de una hoja de ruta para Morales, presidente desde 2006. Unos días después del IV Foro de Países Exportadores de Gas, motivo de la visita de Obiang, el Tribunal Constitucional de Bolivia aceptó el recurso que presentaron legisladores del Movimiento al Socialismo (MAS) para suspender los artículos de la Constitución que prohibían dos reelecciones continuas consecutivas e impedían que Morales fuera candidato en las presidenciales de 2019. La oposición boliviana (leer más)

Política

La caída en cámara lenta de Mugabe

Cada 21 de febrero, Robert Mugabe se celebraba a sí mismo. Es su cumpleaños, feriado desde 2017. El rojo en el almanaque de Zimbabwe reza: Día de la Juventud de Robert Mugabe. Este año, a sus 93, el dictador más viejo del mundo, depuesto en cámara lenta después de 37 años en el poder, se agasajó a sí mismo como otras veces. La fiesta costó más de millón de dólares. No faltó nada: caviar; pato; langosta; mariscos; carne de elefante, búfalo e impala; bombones (preferentemente, Ferrero Rocher); champaña (no cualquiera: Moët & Chandon y Bollinger); whisky (tampoco cualquiera: Johnny Walker y Chivas), y un enorme pastel. Un disparate mientras la población está sumida en la más profunda pobreza. El final de la era Mugabe, un golpe disimulado con el arresto domiciliario y la expulsión de su partido, la Unión Nacional Africana de Zimbabwe-Frente Patriótico (ZANU-PF), se debió a un error suyo: haber metido la cabeza en las fauces de El Cocodrilo, apodo del ex vicepresidente Emmerson Mnangagwa, de 75 años. Era el único que podía (leer más)

Economía

El dragón se viste de seda

En Davos, Suiza, el presidente de China, Xi Jinping, sorprendió al mundo. Pasó a ser la voz cantante de la globalización. El defensor menos pensado. Era, a comienzos de este año, una apuesta fuerte en medio de las turbulencias provocadas por la salida del Reino Unido de la Unión Europea (Brexit) y el discurso proteccionista de Donald Trump. Una cuña para afianzarse como polo de poder, en realidad. Libre y comercio no parecían encajar en el léxico del secretario general del Partido Comunista Chino, declarado hexin (núcleo) por los suyos. Un título honorífico por el cual alcanzó la estatura de líderes históricos, como Mao Zedong, Deng Xiaoping y Jiang Zemin. Cuatro meses después, en Xi’an, antigua capital de China, Xi relanzó el Cinturón y la Ruta de la Seda. Lo arroparon delegados de un centenar de países, incluyendo 28 jefes de Estado. Entre ellos, Mauricio Macri y Michelle Bachelet por América latina, así como Vladimir Putin y Mariano Rajoy. Otra apuesta fuerte. Esta vez, con la promesa de un plan de obras de infraestructura abierto (leer más)